
Son siete de los ocho municipios que se ven afectados por la reducción de la frecuencia de autobuses de la línea Teruel-Orea, que pasa de cinco días a la semana a dos, los lunes y los viernes.
Buj y Hernández han escuchado las peticiones de los alcaldes que han solicitado el apoyo institucional de la Diputación Provincial para evitar que los autobuses de la línea Teruel-Orea pasen solamente dos días a la semana.
Tanto Emma Buj, como Andrés Hernández han mostrado su preocupación por la situación que genera la eliminación de viajes en estas localidades y les han asegurado a los alcaldes de los municipios afectados que pueden contar con el apoyo institucional de la Diputación Provincial para intentar solucionar, de la mejor manera posible, el problema.