La campaña con la que la Diputación de Teruel quiere felicitar estas fiestas lleva como eslogan «Sonrisas de Teruel» e invita a regalar la provincia de Teruel como un lugar para visitar y también para vivir, a partir del testimonio de algunas personas que la han elegido como el lugar para desarrollar su proyecto de vida, con diferentes profesiones que hasta hace algunos años no se hubieran planteado desarrollar en la provincia.
MARTA Y JAIME, ABRAZADOS A LA TIERRA

Jaime y Marta posan con una botella de aceite de oliva elegido el mejor del Bajo Aragón este año, que han producido en Oliete.
Tradición y futuro. En Oliete Montse y Jaime han encontrado su proyecto de vida. Montse Valle es una olietana que tenía claro que deseaba quedarse a vivir en su comarca, cerca de su familia y amigos, y que ha conseguido cumplir este sueño gracias a la oportunidad de trabajar en un proyecto pegado al territorio, que le permite cuidar de los olivos centenarios de la zona, unos recursos naturales que cultivaron sus antepasados.
Jaime Grimaldo es la otra cara de la misma moneda. Era profesor e investigador en Venezuela, pero tuvo que dejar su país y su familia para encontrar un nuevo trabajo con el que poder seguir manteniendo a sus hijos. Cuando llegó a la provincia de Teruel, hace seis años, este proyecto le ofreció una razón para quedarse, trabajar y encontrar una familia extendida, una familia turolense.
Ambos forman del proyecto Apadrinaunolivo.org, ganador este año del premio al mejor aceite de oliva del Bajo Aragón, una iniciativa que ha encontrado la forma de devolverle a los olivares centenarios de la zona el esplendor que lucían décadas atrás.
CARMEN Y DANIEL, PROFESIONES DE ALTURA
De origen extremeño, Carmen Cuevas se unió, hace un año, a la plantilla turolense para trabajar en una especialidad en la que, tristemente, todavía hay pocas mujeres: el mantenimiento de sistemas electrónicos y aviónicos. Encontró la oportunidad en el Aeropuerto de Teruel, de la mano de Tarmac Aragón que genera empleo en la provincia con el mantenimiento y reciclado de aviones.
Gracias a este trabajo, Carmen ha encontrado en la provincia de Teruel un lugar en el que poder conseguir que sus sueños vuelen alto.
Su compañero, Daniel Lloveras, llegó un año antes que ella buscando una empresa que apostase por el talento joven. Tras cursar el grado superior de Mantenimiento Aeromecánico, encontró en Teruel esa oportunidad que le ha permitido aprender y mejorar en su pasión.
ROBERTO BOU, SOBRE DOS RUEDAS EN SU PARAÍSO SECRETO
El verano es la estación del pueblo, la mejor del año para Roberto Bou que pasaba los suyos en Mora de Rubielos, el pueblo natal de su madre. Tras muchos años viviendo el sueño de verano, el ciclista de la Sierra de Gúdar tuvo claro que buscaría la forma de vivir en la provincia que le había regalado sus mejores recuerdos.
Y así fue. Un contrato profesional fruto de sus primeros éxitos en el ciclismo le condujo directo a su territorio soñado, su paraíso secreto que tanto había abanderado porque sí, la provincia de Teruel es la gran desconocida, pero también un entorno inigualable, al que se han ido sumado más ciclistas profesionales.
El poco tráfico, el aire limpio, los alimentos de calidad y un terreno de altura, enamoraron a Roberto desde el día uno y han resultado ser la clave para conseguir éxitos como la Copa del Mundo en el Montblanc, una de las carreras más difíciles del mundo, en la que sorprendió a todos con su victoria y posicionó a la provincia en el ranking internacional.
SONIA LANUZA Y LYDIA VERA, PROTAGONISTAS DE SU OBRA
Arte y compromiso social se combinan en Alcañiz. El teatro abre una ventana a la provincia y su gente, de la mano de Sonia Lanuza, que ofrece a sus vecinos y vecinas un escenario sobre el que construir nuevas historias.
La alcañizana recorrió el mundo durante catorce años hasta que la posibilidad de comprar un terreno de sus padres cerca de su localidad natal le permitió establecerse en lo rural y cumplir uno de sus sueños: construir su propia casa. Desde entonces, Sonia no imagina su vida en otro lugar que no sea en la provincia de Teruel, donde ha podido ver envejecer a sus padres, criar a su hija y, ahora, abrir su proyecto profesional a otras ciudades, como un compás, con la aguja bien fija en sus raíces.
La pasión de Sonia se plasmó en su propio estudio, en el que alumnas como Lydia Vera crecen personal y profesionalmente. Gracias al teatro, entre ambas se ha forjado una bonita relación profesional y de amistad que las ha llevado a crear proyectos como Gregoria, que combina la vocación de Lydia como cantante y la pasión de Sonia por el teatro.
RUBÉN Y GEMMA, ALTA COCINA DE PROXIMIDAD
Una torre más parecida a la de un castillo que a la de un hotel despunta entre el paisaje del Matarraña desde hace casi treinta años. Un lugar del siglo XV para escaparse del ruido de la ciudad, sumergirse en la naturaleza y disfrutar de la gastronomía, un lugar conocido como la Torre del Visco.
Un matrimonio inglés asentado en Madrid lo dejó todo para comenzar un proyecto profesional en común, un pequeño hotel que ofreciese un retiro y un trato muy cercano al huésped. Durante más de dos años, Gemma y Piers rastrearon el mapa nacional hasta que se encontraron con el Matarraña, con el que surgió amor a primera vista y construyeron su sueño.
Rubén Catalán siempre se ha sentido muy vinculado al Matarraña por la proximidad de su localidad natal, Maella. Así que no imaginaba mejor lugar para volver a su tierra que los fogones de este emblemático hotel, en donde la apuesta por el producto de proximidad y su cocina del recuerdo le han valido el galardón de la estrella verde Michelín.
MARÍA FERRER Y MARIO GUTIÉRREZ, INVESTIGACIÓN E INNOVACIÓN
María Ferrer y Mario Gutiérrez se dedican a la producción e investigación en un campo que les apasiona, la producción de abonos para el cuidado de nuestro suelo. María lleva nueve años dedicándose a su vocación en Fertinagro Biotech, donde es la responsable bióloga de la producción biotecnológica. Un puesto que le ha permitido asentarse en Utrillas para dedicarse a su profesión en la tierra que adora, la provincia de Teruel.
En la misma empresa, Mario ha encontrado la posibilidad de desarrollar proyectos innovadores y punteros con los que mejorar la nutrición vegetal en todo el mundo. En Teruel ha conseguido uno de sus sueños, trabajar como biotecnólogo investigador en el laboratorio de agrotecnología del Europa, el Centro de Investigación en Biotecnología Aplicada y Sostenbilidad, en el que se encarga del análisis de suelos.
SERGIO Y LAURA, UNA PEQUEÑA PANTALLA EN EL JILOCA
Dar voz a sus vecinos y vecinas, generar un archivo audiovisual y apostar por el periodismo local, de análisis y de calidad han sido los valores por los que ha trabajado Sergio Martínez durante más de una década encabezando Calamocha TV.
Un medio que nació hace veintiocho años y que gracias a su esfuerzo y tesón sigue informando y acercando historias. De entre los profesionales que han acompañado a Sergio en su camino, Laura Malo llegó con 20 años, en sus primeras prácticas de verano y con mucha ilusión por aprender.
Verano tras verano, la futura periodista iba creciendo personal y profesionalmente en un medio que le ha permitido seguir vinculada a su tierrra, a su familia y amigos. A día de hoy, a sus 28 años, Calamocha TV ya no es aquella televisión donde realizó sus primeros pinitos, sino su segunda casa.