Manuel Rando y la diputada Ana Cris Lahoz con la charanga «Esfuria tronadas».

El tercer viaje del proyecto Ruta 234, con el que colabora la Diputación de Teruel (DPT), finaliza este fin de semana tras 15 días de recorrido para una experiencia artística alrededor de la carretera nacional N-234. La penúlima parada ha tenido lugar hoy en Villarquemado, con un encuentro entre los artistas participantes y los vecinos y vecinas del municipio turolense en el que ha participado el presidente de la institución provincial Manuel Rando y la diputada y concejala Ana Cris Lahoz.

Los artistas que han formado parte del proyecto, entre ellos el turolense Darío Escriche, han compartido con los asistentes al encuentro de Villarquemado las experiencias vividas durante el viaje. Los actos han comenzado con la presentación del proyecto, organizado por la plataforma Pueblos en Arte, y las características del trabajo que están realizando cada uno de los 5 artistas que participan en él. Por ejemplo, el representante turolense ha explicado el proyecto de señales arbóreas que a partir de ahora debe plasmar en un libro conjunto que recordará la experiencia y se repartirán a lo largo del recorrido de la carretera.

En esa presentación, el presidente de la DPT ha tomado la palabra para mostrar su satisfacción ante un proyecto “muy original y diferente” y ha señalado que la cultura es fundamental para fijar población, señalando su aspecto como motor de generación económica. Ha recordado que la institución provincial ha apoyado en los últimos años a los artistas de la provincia a través de distintas acciones, intentando paliar el duro episodio de la Covid-19 y procurando que las actividades culturales se distribuyan en los municipios a lo largo de todo el año, también mediante el aumento de en un 75% de la cantidad que estaba destinada al plan cultural.

Tras la presentación, y después de trasladarse al pabellón con la música de la charanga Esfuria Tronadas, la plataforma organizadora ha realizado una acción artística acerca de la carretera nacional, plasmando el recorrido de la vía en un dibujo sobre una pared. Los vecinos y vecinas participantes han ido añadiendo vivencias, sensaciones o anécdotas. Darío Escriche por su parte ha expuesto sus experiencias sensoriales a través de los árboles y ha explicado sus trabajos alrededor de las sensaciones.

La jornada ha finalizado por la tarde, con la proyección en el cine del municipio del documental “Soñando un lugar”. Un trabajo de Alfonso Kint que recoge la historia real de la plataforma Pueblos en arte a raíz del traslado de una pareja cansada de vivir en la capital con su hija recién nacida al pequeño pueblo de Torralba de Ribota, que es donde concluye este tercer viaje de Ruta 234.

La Ruta 234 es una experiencia inspiradora cuyo objetivo es la creación de obras de arte con las que reflexionar sobre la realidad que se vive en los territorios por lo que transcurre. Los artistas participantes fueron elegidos en una convocatoria abierta dirigida a personas nacidas, residentes o vinculadas a las provincias de Teruel, Burgos, Soria, Zaragoza, Castellón o Valencia.

Los artistas explicando sus proyectos ante el presidente de la DPT.

Darío Escriche, Isabel González, Darío Gil, Gigi Ei y Pelayo Cienfuegos y Lucía Bailón se han embarcado en un viaje de 15 días, desde el 1 de marzo, en una iniciativa artística pionera en España, con la que colabora la DPT dentro de su línea de trabajo de acercar la cultura al mayor número de municipios e integrar a su población en el mundo cultural, dando a su vez apertura a los artistas turolenses poniendo en valor su figura. Esta misma semana, su camino ha discurrido por la provincia de Teruel y han visitado municipios como Burbáguena, donde conocieron al artista local José Azul.

En cada una de las ediciones de la Ruta 234 se ha ido generando una identidad propia que conecta a sus gentes y a sus pueblos, poniendo en valor el territorio. Los diferentes artistas realizan el viaje generando obra que pueda inspirar nuevas formas de pensar el territorio. El contenido del viaje que cada artista propone es testimonio de hechos, vivencias, tradiciones, costumbres, hábitos, valores, modos de vida o desarrollos económicos, sociales, políticos, religiosos o estéticos propios de una comunidad y útiles para el conocimiento de su identidad.

El siguiente paso de este proyecto es la elaboración de una publicación en formato revista o fanzine por parte de los artistas implicados junto con el equipo de la plataforma Pueblos en Arte basada en sus experiencias. Tras poner en común los trabajos realizados y elaborar un primer boceto de la publicación, los artistas volverán a sus casas y dispondrán de cinco días para entregar el material terminado. La asociación elaborará las artes finales y se ocupará del proceso de impresión.

Cada artista participante recibe 1.000 euros en concepto de honorarios una vez entregado el trabajo, además de una bolsa de viaje valorada en otros 1.000 euros para dietas y estancia y 10 ejemplares de la publicación resultante. La obra realizada pertenecerá a los autores, aunque cederán a la asociación Pueblos en Arte los derechos de reproducción y documentación.

Los anteriores dos viajes del proyecto Ruta 234, que comenzó en 2018, se materializaron en un fotolibro, una exposición y dos acciones artísticas en dos de los pueblos que atraviesan la ruta.

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